Una amplia representación de Martxoak 3 elkartea – Asociación Víctimas 3 de Marzo ha participado en la concentración convocada por Sanfermines´78 Gogoan con motivo de la visita del ministro franquista a Euskal Herria.
El exministro Rodolfo Martín Villa se ha topado con una fuerte respuesta a su presencia en Iruñea. El Ayuntamiento de la capital navarra ha recordado que desde 2019 está declarado «persona non grata» en la ciudad. Y cientos de personas se han concentrado ante el evento en que participaba.
Cientos de personas convocadas por la plataforma Sanfermines 78 Gogoan han rechazado este jueves tarde la presencia en Iruñea del exministro de Interior español Rodolfo Martín Villa, recordando su responsabilidad en crímenes de Estado como la matanza del 3 de Marzo en Gasteiz o el asalto a las fiestas de Iruñea en 1978.
Entre los participantes en la concentración estaba Fermin Rodríguez, hermano de Germán Rodríguez, muerto por disparos policiales aquel 8 de julio. Ha sostenido una pancarta contra la «impunidad» que ampara a Martín Villa y otros muchos, junto a la que se ha colocado otra con los rostros de los cinco trabajadores a los que la Policía mató en Gasteiz dos años antes.
Mentxu Velasco y Josu Chueca han leído en euskara y castellano un comunicado en el que señalan a Rodolfo Martín Villa como «el más claro exponente de lo que fue el franquismo y su criminal represión», aludiendo al «alevoso crimen de Estado» de Sanfermines 78, la posterior muerte de Joseba Barandiaran en Donostia, las dos de Montejurra o las siete de la semana pro-amnistía de 1977, además de las de Gasteiz.
Sobre todo ello, un mismo desenlace: «No habido justicia, sino silencio, encubrimiento e impunidad», han subrayado.
«Policía asesina» ha sido uno de los lemas más coreados en esta protesta. Ha tenido lugar ante un céntrico hotel en el que Martín Villa intervenía junto al dirigente histórico de la derecha españolista en Nafarroa Jaime Ignacio del Burgo. La presentación de un trabajo sobre el Amejoramiento ha sido empleada por Del Burgo para invitar al exministro español a Iruñea en un aparente intento de desagravio, pero ha tenido el efecto contrario: reactivar la denuncia.
Horas antes, además, esta ha tomado también una plasmación institucional. Los tres grupos que integran el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Iruñea, EH Bildu, Geroa Bai y Contigo Zurekin, han denunciado la presencia de Martín Villa en Iruñea.
«Persona non grata»
Los tres grupos sustentan este rechazo recordando que «desde 2019 el exmandatario de la dictadura y responsable de Interior durante el primer Gobierno de Adolfo Suárez, es considerado ‘persona non grata’ en la ciudad tras un acuerdo de Pleno».
Los grupos recuerdan que Martin Villa era el titular del Ministerio del Interior durante los trágicos sucesos de Sanfermines de 1978 y que «esta y otras responsabilidades le hicieron merecedor de petición de extradición para ser juzgado en la denominada Querella Argentina». Asimismo, quienes hoy integran el Gobierno municipal ponen en valor que este proceso abierto por la jueza Servini para esclarecer y juzgar los crímenes contra la Humanidad cometidos durante el franquismo y la denominada Transición, fue respaldado en su integridad por el Ayuntamiento de Iruñea a través de sucesivos acuerdos plenarios.
Uno de estos, fechado el 7 de marzo de 2019, es el que incluye la declaración de persona «non grata» en la ciudad para Martín Villa. En aquella votación, que salió adelante por mayoría, el Consistorio instaba al Gobierno español «a dejar sin efecto el Acuerdo del Consejo de Ministros de 13 de marzo de 2015 y, en consecuencia, a tramitar y aceptar la extradición de Martín Villa a la República de Argentina».
Un segundo punto de aquel acuerdo planteaba «recabar que, en aplicación del principio de Derecho Internacional extraditar o juzgar, se adopten por el Estado todas aquellas medidas necesarias para que por los tribunales españoles se proceda a la investigación y enjuiciamiento de los crímenes contra la humanidad cometidos durante la dictadura franquista y la llamada Transición política y, muy en particular, de todos aquellos cuya responsabilidad pudiera recaer en Martín Villa».
Era el tercer punto de acuerdo de aquella iniciativa el que pedía declarar al ministro del Interior durante los sucesos de Sanfermines 1978 como «persona non grata en este municipio».
Martín Villa duerme tranquilo
En su charla sobre el Amejoramiento, en la que también ha cargado contra la ley de amnistía que se prepara para el «procés», Martín Villa ha sido preguntado por la querella argentina y ha respondido esto: «Llevo casi diez años en este pleito, aunque tengo que decirles que yo no dejo de dormir ni un segundo en estos diez años».
No obstante, luego ha dicho sentir «la tranquilidad que da saber que se ha ganado».
«Todas esas querellas se fundamentaban en que en aquel tiempo no había habido errores de policías o guardias civiles (que pudo haberlos y los hubo, otra cosa es que fueran crímenes), sino que se fundamentaban en que nosotros estábamos haciendo un plan deliberado y sistemático para eliminar la vida de las personas, de los adversarios políticos partidarios de un régimen democrático. Y eso es escribir una historia completamente contraria –ha sentenciado–, porque la Transición fue justo lo contrario».